Falsa alarma social por la gripe A

El último comunicado del Ministerio de Sanidad y Política Social, emitido por Televisión el 19 de mayo a las 8:00 horas, era claro, conciso y tranquilizador: “En nuestro país hay 103 casos confirmados de gripe, ninguno de los cuales permanece hospitalizado. Además, todos han respondido de manera favorable al tratamiento. Salvo 30, todas las personas confirmadas de contagio por el virus A H1N1 procedían de Méjico”.  

La gripe porcina es una enfermedad respiratoria de los cerdos causada por un virus de la gripe denominado tipo A, el cual provoca brotes comunes de gripe entre estos animales. Este virus puede propagarse entre los cerdos durante todo el año, pero la mayoría de los brotes infecciosos ocurren al igual que en las personas, en los meses finales del otoño e invierno. En el caso del actual brote, la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó que al menos algunos de los casos corresponden a una cepa nunca antes vista del virus H1N1 de la gripe A. Si bien es llamada gripe porcina, esta nueva cepa no infecta y nunca ha sido vista en cerdos. La amenaza es la transmisión de persona a persona. 

Los síntomas de esta gripe en las personas son similares a los de la gripe común: fiebre, letargo, falta de apetito, tos, secreciones nasales, dolor de garganta, náuseas, vómitos y diarrea.

La gripe no se transmite por los alimentos. La gripe es más grave en personas jóvenes y sanas, ya que la reacción nociva que provoca es la acumulación de defensas del propio organismo. “Los afectados en nuestro país son viajeros que recientemente habían estado en Méjico", asegura el Ministerio en un comunicado. La OMS reduce el periodo de incubación de la gripe A " entre un día y cinco días". Esto significa que se acerca al de una gripe normal estacional. Hasta el momento no se ha detectado la transmisión de persona a persona que no esté relacionada con viajes a dos países, por una parte Méjico y por otra Estados Unidos.

En España se trabaja de forma coordinada con las autoridades de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Comisión Europea para el seguimiento de la enfermedad. La autoridad sanitaria ha afirmado que "La situación no es de emergencia porque la tenemos controlada. Hemos activado todos los protocolos para la prevención de la posible expansión de este virus gripal”.

Respecto al tratamiento, han subrayado que los fármacos que adquirió España para poder cubrir una posible pandemia de gripe aviar sirven también para tratar esta gripe A.

Por todo ello, parece que la alarma social es injustificable frente a los hechos. Esta más bien condicionada por la desinformación y la percepción de un virus expandiéndose por el mundo sin control. Esta idea de catástrofe natural esta arraigada por tantas obras literarias y fílmicas que ya, nada  parece fuera de lo común.

Las imágenes aparecidas en los medios televisivos en un primer momento eran alarmantes, colocación de las mascarillas tanto en supermercados, farmacias,  calles, Colegios cerrados, aeropuertos vacíos y vuelos anulados a diferentes países, pero ahora la normalidad vuelve de nuevo a los habitantes. Ha habido casos aislados de histerismo, pero sin efecto domino, que se han ido resolviendo en las sesiones psicológicas. Esto ha sido todo. Debemos tener calma y dejar que las autoridades sanitarias sigan en España con los protocolos activados de  prevención para controlar la posible expansión del virus gripal.